Union Carbide, multinacional estadounidense dedicada a la fabricación de productos químicos establece en Bhopal una fábrica de insecticida para uso agrario. Esto supone no sólo un número importante de puestos de trabajo estables sino que además dicho pesticida mejorará enormemente las cosechas de una zona donde la pobreza y el hambre son endémicas, la fábrica estaba participada en un 49% por el Gobierno de la India.
Durante un tiempo todo marcha perfectamente, pero la fábrica empieza a tener pérdidas económicas y se deciden una serie de recortes en los gastos, empezando por supuesto por los gastos en seguridad. Los trabajadores no cualificados ni siquiera sabían que los productos que manejaban eran tóxicos.
La noche del 2 al 3 de diciembre de 1984, mientras se limpiaba la planta con agua a presión, los cristales de cloruro sódico y restos de metales que esta arrastraba entraron en contacto con el gas almacenado debido a la corrosión de las tuberías. Se generó una reacción exotérmica que hizo saltar las válvulas de presión de los tanques liberando 40.000 toneladas de isocianato de metilo.
El sistema de refrigeración de los tanques y los filtros de vertido a la atmósfera estaban desconectados para ahorrar, el isocianato de metilo al contacto con el aire se descompuso en fosgeno, monometilamina y ácido cianhídrico, altamente tóxicos y más densos que el aire.
El viento soplaba de norte a sur y arrastró la nube tóxica hacia los barrios más pobres, se saturaron los hospitales y la gente no pudo obtener asistencia sanitaria (precaria por otro lado).
Sin entrar en detalles escabrosos, el día 5 de diciembre ya se contabilizaban 3.500 fallecidos y miles de afectados, unos meses después el número de fallecidos se estimó entre 20.000 y 30.000 y el de afectados por encima de los 200.000 (con afecciones graves).
Se dice que “cuando la justicia es lenta, deja de ser justicia”, la sentencia judicial sobre el accidente químico más importante de la historia se publicó el 7 de junio de 2010; 24 años, 6 meses y 5 días después del accidente.
La justicia India ha condenado a los ocho inculpados (directivos de Union Carbide) a dos años de prisión eludibles con una multa de 8.700 € (el presidente de la filial India, el estadounidense Warren Anderson de 89 años se halla prófugo), y a la empresa a una indemnización de 394.000€.
La Empresa Unión Carbide ya no existe en la India y sus activos fueron adquiridos por la también estadounidense Dow Chemical.
¿CUÁNTO VALE LA VIDA DE UN CIUDADANO POBRE DE LA INDIA?
Realmente el mundo se ha vuelto loco.
La vida en genral en los países pobres, vale bastante poco enfermero9..Qué vergüenza de primer mundo!
ResponderEliminarCamino...
ResponderEliminarNo es que valga poco, es que no vale nada...!!!