“Esta no era una web de descargas pero alguien decidió que uno de mis post no le gustaba y la demandó por infringir derechos de autor ante la “Sección Segunda”.
Ahora estoy peleando en los tribunales para demostrar que no violaba ningún derecho y poder volver a tener el blog en línea ya que no me permitieron defenderme ante ningún tribunal cuando me denunciaron.”
Esa situación que puede parecer una exageración sería lo que podría ocurrir si se aprueba la Disposición Final Primera de la Ley de Economía Sostenible en una Comisión, ni siquiera en un pleno del Congreso. Y para hacer la situación más grave, es una ley que no procede de la soberanía nacional del pueblo español si no que ha sido impuesta por los Estados Unidos como se ha demostrado en los cables filtrados por Wikileaks.
El arma para luchar contra las infracciones de los derechos de autor se puede convertir en una poderosa arma de censura en este país. Imagínatela en manos de cualquier político metido en un asunto de corrupción.
Como diría el poeta "parece como si el mundo andara de espaldas",tanto que ya empiezo a creer en la "involución"... ¿qué va a ser lo próximo, cosernos la boca con pespuntes de mentiras veladas?
ResponderEliminarJuer me los has puesto de corbata (los güevarios), muy bien explicado, voy a compartirlo.
ResponderEliminarUn beso y Felíz Navidad
Por lo pronto la ley se la han tenido que meter por donde amargan los pepinos, veremos en el siguiente asalto, que me parece a mi que va a ser más de lo mismo.
ResponderEliminarBesotes a los dos E
Ellos nunca se rinden, viven de eso. Fracaso puramente coyuntural, me temo que encontrarán la manera de negociar su aprobación. Lo que nos costará en especias no es nada comparado con lo que le costará al espíritu de la justicia. ¿Qué no? ¡Ojalá me equivoque!
ResponderEliminarUn esperanzador saludo, junto con mis mejores deseos navideños.